Enviado al correo por EVADE CHILE
Cómo (no) organizarse si lo que se busca es subvertir la lógica mercantil y patriarcal del dinero
1- La organización no puede depender de internet.
2- Lxs participantes deben acordar: primero, una periodicidad (diaria, semanal, mensual, anual, etc.); luego, una cantidad de tiempo a reunirse (una hora, 6 horas, 3 días, etc.), y por último un lugar físico (casa, parque, junta vecinal, lugar de trabajo, etc.).
3- Estos factores dependerán de la urgencia de los objetivos y seguridad del contexto.
4- Durante el periodo de reunión se realiza todo el trabajo de logística necesaria para que la organización produzca (discusiones, acciones, textos, videos, arte o anti-arte, etc.).
5- Con el tiempo, se pueden ir creando comisiones internas que agilicen ciertas labores.
6- Ninguna posición está por sobre otra, la división del trabajo no se ata a ninguna ideología ni política ni técnica; debe responder al imaginario más profundo posible.
7- La rotación es ventajosa, cíclica. La autoridad paralizante, tiende a la obsolescencia.
8- Toda la actividad de la organización ocurre en el periodo de tiempo que se compare físicamente. La organización vive del encuentro de cuerpos físicos cargados de emociones e ideas.
9- La comunicación por internet o por teléfono no puede reemplazar la comunicación cara a cara.
10- Ya no se pregunta más “qué puedes dar a la organización”.
11- El éxito o fracaso dependerá de la motivación, iniciativa, claridad y sobre todo capacidad de sus participantes de comunicarse y aceptarse mutuamente.
12- Esta era la forma de organizarse de las comunidades que nos preceden, no virtual, sino real: organización a escala humana.
13- La sensación de “atomización” y separación generalizada que se vive, la interminable lista de equipos y partidos a los que pertenecer y qué defender, está inexorablemente atada a la virtualidad real del valor-dinero-capital.
14- Organizarse no es un fin en sí mismo.
15- Esto es solo el comienzo.